Hace 10 años | Por paniscus a agenciasinc.es
Publicado hace 10 años por paniscus a agenciasinc.es

Quedarse dormido al lado de un Tiranosaurio rex, o con tiburones blancos merodeando alrededor, suena a aventura de película, pero es posible. Algunos museos abren sus puertas toda la noche para que pequeños y grandes puedan acampar en ellos. Los que tienen pesadillas, que no se preocupen, siempre pueden colocar su esterilla y su saco en el pasillo de las inofensivas mariposas o los inertes y brillantes minerales.