Cuando leía las críticas cinematográficas del señor Boyero en distintos periódicos y revistas especializadas de este país sorprendente, gran parte del público creía que iban en serio. Nadie podía imaginar que era un juego. Nadie, hasta hoy, sabía que la de “Boyero” era una identidad artística, inventada como parte de un proyecto de arte contemporáneo que por fin se revela como tal. "Al principio temíamos que nos pillasen enseguida por estar nuestras críticas desprovistas del menor sentido"
Comentarios
Cuando leía las críticas cinematográficas del señor Boyero...
El artículo entero es un elaborado chiste que le queda grandísimo al imbécil de Boyero.
#3 #1 La verdad es que yo leí hace 3 críticas suyas y decidí ,desde aquel momento , que este señor no tenía ni puñetera idea de cine .Todo un trolazo .Lo peor es que algunos de mis conocidos lo tenían como uno de los mejores críticos nacionales
Es curioso, pero cuando leía sus críticas tras haber visto las películas, pensaba que el tío carecía de gusto. Veo que no soy el único.
La críticas, en general, se resumen en “a mí me ha gustado” o “a mí no me ha gustado” por mucho que las disfracen de palabrería. Luego el lector tendrá que valorar si normalmente su gusto coincide con el del crítico.
En cualquiera de los casos, considero que dejar de ver una película porque a un señor concreto le gustan o le dejan de gustar, es la mejor forma de perderse películas excelentes o que si no son tan “buenas” podrían gustarte o inspirarte de algún modo.