La cadena amiga cumple 25 años, una edad que haría madurar a cualquier persona pero que apenas se vislumbra en una emisora que constantemente parece vivir atrapada en la edad del pavo. Entretenimiento y vanguardia siempre han sido las excusas utilizadas por Telecinco en su constante “todo vale” con tal de captar la visión -que no atención- del espectador, y si para ello había que cosificar a la mujer y rebajarla hasta los límites más burdos y dantescos posibles, no serían ellos quienes interpusiesen ninguna traba moral a dicho fin.