Hay una adicción al juego femenina y otra masculina. Y son opuestas. La de los hombres es cocaína. La de las mujeres, morfina.Una mujer de cincuenta y muchos años, en un barrio como Usera o Puente de Vallecas, cargando una de esas bolsas reutilizables de Mercadona o Carrefour
Os resumo el artículo: pobrecitas las mujeres ludópatas, que lo hacen sin maldad y porque la sociedad no se porta bien con ellas y qué cabrones los hombres ludópatas que lo hacen por ser más machitos que nadie y por pura competitividad. Todo ello basado en unos supuestos estudios que al autor se le olvida enlazar o mencionar por su nombre o autores. Uich, qué olvido más tonto.
"Que los hombres jueguen y apuesten resulta aceptable. Y si ganan se les alaba, y si se vuelven ludópatas se les consuela y apoya (y a menudo hay una esposa o una novia que los obliga a someterse a un tratamiento). Pero en las mujeres la enfermedad del juego es intolerable. Es un tabú. Supone un estigma demasiado sucio"
Pues para mi ambos casos iguales... Jamas he considerado aceptable que un hombre sea ludopata por muchas veces que gane...
Por otro lado, jamas he visto a ninguna mujer que esconda que va a jugar al bingo o a las tragaperras y jamas he visto a nadie que las estigmatice por ello...
Las casas de apuestas, con su atmósfera de ambigüedad moral, con su testosterona, con sus imágenes de futbolistas y tenistas golpeando pelotas que imprimen estelas de velocidad, con sus restos de cocaína en la tapa del retrete —lugares hermanados con los prostíbulos, lugares en el límite de la ley, fronterizos—, resultan hostiles para las mujeres.
No me queda claro si esto lo estan relatando como un inconveniente o una ventaja: para mi, si es cierto, desde luego es una ventaja que las mujeres no se sientan comodas en las tipicas casas de apuestas, ya que es un sitio menos donde engancharse al juego pues.
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Os resumo el artículo: pobrecitas las mujeres ludópatas, que lo hacen sin maldad y porque la sociedad no se porta bien con ellas y qué cabrones los hombres ludópatas que lo hacen por ser más machitos que nadie y por pura competitividad. Todo ello basado en unos supuestos estudios que al autor se le olvida enlazar o mencionar por su nombre o autores. Uich, qué olvido más tonto.
Qué cansinez de clichés sexistas.
"Que los hombres jueguen y apuesten resulta aceptable. Y si ganan se les alaba, y si se vuelven ludópatas se les consuela y apoya (y a menudo hay una esposa o una novia que los obliga a someterse a un tratamiento). Pero en las mujeres la enfermedad del juego es intolerable. Es un tabú. Supone un estigma demasiado sucio"
Pues para mi ambos casos iguales... Jamas he considerado aceptable que un hombre sea ludopata por muchas veces que gane...
Por otro lado, jamas he visto a ninguna mujer que esconda que va a jugar al bingo o a las tragaperras y jamas he visto a nadie que las estigmatice por ello...
Las casas de apuestas, con su atmósfera de ambigüedad moral, con su testosterona, con sus imágenes de futbolistas y tenistas golpeando pelotas que imprimen estelas de velocidad, con sus restos de cocaína en la tapa del retrete —lugares hermanados con los prostíbulos, lugares en el límite de la ley, fronterizos—, resultan hostiles para las mujeres.
No me queda claro si esto lo estan relatando como un inconveniente o una ventaja: para mi, si es cierto, desde luego es una ventaja que las mujeres no se sientan comodas en las tipicas casas de apuestas, ya que es un sitio menos donde engancharse al juego pues.
#1 ha entrado a un bingo?
Que bien escribe este tipo...