"Un parásito recién descubierto transforma de manera tan dramática a su huésped, una hormiga, que ella llega a semejar una jugosa baya roja y lista para recoger, de acuerdo a un informe aceptado para su publicación en The American Naturalist. Este es el primer ejemplo de mimetismo de una fruta provocado por un parásito, dicen los coautores. Supuestamente, el cambio dramático en apariencia y comportamiento engaña a las aves para que coman a las hormigas infectadas –con todo y parásitos– y más tarde esparzan al parásito en sus heces."
Comentarios
#0 Enlace a vídeo: http://www.berkeley.edu/news/media/releases/2008/01/ants-vid.shtml
#0 Vía http://www.berkeley.edu/news/media/releases/2008/01/16_ants.shtml
Esto es como lo de los aurones ¿no?, aquel que lanzaba rayos y convertía a los malos en fruta.
Puaj. Vas por el bosque, recoges una rica y brillante baya, la muerdes y notas una explosión de pus y sangre de insecto deslizándose por tu boca, introduciéndose en tu garganta, debajo de tu lengua. En el líquido flotan los restos de los órganos de la antigua hormiga, que en tu paladar se asemejan a amargos y blandos tropezones. Delicioso.
#5
hmmmm.... baaayas....
http://www.webalice.it/elenamorelli/homer.gif
Que yuyu....
Arggg... No quiero convertirme en una manzana...
Si me dan ganas de comerla sólo con la descripción.
Dentro de poco Hagen Dazs de rojas y maduras bayas.
Todo un aliciente para que le rompan el culo
El enlace no funciona
La naturaleza se abre camino...