c+p+t Alberto João Jardim, el presidente del gobierno regional de las islas garantizó que va a apoyar a su pueblo el día que se quiera independizar de Portugal.
El presidente del gobierno regional de Madeira (relacionado con el partido social demócrata y vicepresidente del Partido Popular Europeo) dijo estas palabras después de reunirse con el líder del PSD/Açores (el Partido Social Demócrata de las islas), Carlos Costa Nieves, durante lo que "pasaron revista a la situación de la autonomía" de ambas regiones insulares.
En su juntanza los dos políticos también hablaron de Estado y de la "relación entre las regiones autónomas y el Gobierno de la República", tema a lo que Jardim se refirió en estos términos: "Yo tengo remado contra esa marea y si hoy hay autonomía y la cuestión de la unidad nacional no está encima de la mesa fue porque mucho me empeñé en este sentido, aunque Lisboa no lo reconozca". Luego fue cuando Jardim pronunció las palabras que llevaron la polémica al viejo continente: "Si el pueblo madeirense un día quisiera la independencia, mi lugar está al lado del pueblo madeirense".
"No soy independentista"
El presidente de Madeira también dijo que los madeirenses quieren seguir siendo portugueses: "No soy independentista y continúo creyendo en el princípio de la unidad diferenciada", comentó, pero quiso recordar que si el pueblo madeirense quiere otro sistema autonómico, y Lisboa no lo acepta, "por simple autoritarismo caprichoso y absurdo", lo que venga después posiblemente tenga mucho que ver con la independencia.
"El pueblo manda"
El líder del PSD/Açores, Costa Nieves también dijo estar de acuerdo con la idea de que "el pueblo manada" y añadió que las regiones autónomas "son portuguesas porque lo quieren ser", pero defendió la idea de que las autonomías y el país deben ser construidas por ambas partes.
Un político muy controvertido
El presidente del gobierno autónomo de Madeira, Alberto Joãel Cardoso Gonçalves Jardim también es periodista, más allá de ser un político de los más polémicos de Portugal. Jardim fue acusado, varias veces, de autoritarismo, corrupción, silenciamento de la oposición y de emplear su cargo para beneficio personal. De todas formas, siempre obtuvo la mayoría absoluta en las elecciones.
Relacionado, toda su vida con el partido Social Demócrata, según cuentan, en su juventud (cuando hacía el servicio militar), perteneció al Frente de Libertação do Arquipélago da Madeira. El protagonismo internacional le llegó el año pasado, cuando, el 19 de febrero, presentó su dimisión del cargo de Presidente do Governo Regional como protesta a la joven Lei de Finanças Regionais, que presentaba, por aquel entonces, el gobierno de Sócrates. Su renuncia llevó a Sócrates a disolver la Assembleia Legislativa da Região y a convocar elecciones anticipadas el 6 de mayo, en las que de joven ganó Jardim, de esta vuelta con la mayoría reforzada.
Además se tiene opuesto a aplicar otras leyes llegadas de Lisboa, como la de la Interrupção Voluntária da Gravidez (IVG) [Interrupcción Voluntaria del Embarazo], (que significaba la despenalización del aborto en el país), que el gobierno madeirense se comprometió a aplicar, después de mucho pelear con Sócrates, este año.
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El presidente del gobierno regional de Madeira (relacionado con el partido social demócrata y vicepresidente del Partido Popular Europeo) dijo estas palabras después de reunirse con el líder del PSD/Açores (el Partido Social Demócrata de las islas), Carlos Costa Nieves, durante lo que "pasaron revista a la situación de la autonomía" de ambas regiones insulares.
En su juntanza los dos políticos también hablaron de Estado y de la "relación entre las regiones autónomas y el Gobierno de la República", tema a lo que Jardim se refirió en estos términos: "Yo tengo remado contra esa marea y si hoy hay autonomía y la cuestión de la unidad nacional no está encima de la mesa fue porque mucho me empeñé en este sentido, aunque Lisboa no lo reconozca". Luego fue cuando Jardim pronunció las palabras que llevaron la polémica al viejo continente: "Si el pueblo madeirense un día quisiera la independencia, mi lugar está al lado del pueblo madeirense".
"No soy independentista"
El presidente de Madeira también dijo que los madeirenses quieren seguir siendo portugueses: "No soy independentista y continúo creyendo en el princípio de la unidad diferenciada", comentó, pero quiso recordar que si el pueblo madeirense quiere otro sistema autonómico, y Lisboa no lo acepta, "por simple autoritarismo caprichoso y absurdo", lo que venga después posiblemente tenga mucho que ver con la independencia.
"El pueblo manda"
El líder del PSD/Açores, Costa Nieves también dijo estar de acuerdo con la idea de que "el pueblo manada" y añadió que las regiones autónomas "son portuguesas porque lo quieren ser", pero defendió la idea de que las autonomías y el país deben ser construidas por ambas partes.
Un político muy controvertido
El presidente del gobierno autónomo de Madeira, Alberto Joãel Cardoso Gonçalves Jardim también es periodista, más allá de ser un político de los más polémicos de Portugal. Jardim fue acusado, varias veces, de autoritarismo, corrupción, silenciamento de la oposición y de emplear su cargo para beneficio personal. De todas formas, siempre obtuvo la mayoría absoluta en las elecciones.
Relacionado, toda su vida con el partido Social Demócrata, según cuentan, en su juventud (cuando hacía el servicio militar), perteneció al Frente de Libertação do Arquipélago da Madeira. El protagonismo internacional le llegó el año pasado, cuando, el 19 de febrero, presentó su dimisión del cargo de Presidente do Governo Regional como protesta a la joven Lei de Finanças Regionais, que presentaba, por aquel entonces, el gobierno de Sócrates. Su renuncia llevó a Sócrates a disolver la Assembleia Legislativa da Região y a convocar elecciones anticipadas el 6 de mayo, en las que de joven ganó Jardim, de esta vuelta con la mayoría reforzada.
Además se tiene opuesto a aplicar otras leyes llegadas de Lisboa, como la de la Interrupção Voluntária da Gravidez (IVG) [Interrupcción Voluntaria del Embarazo], (que significaba la despenalización del aborto en el país), que el gobierno madeirense se comprometió a aplicar, después de mucho pelear con Sócrates, este año.
Jo... aún no lo ha dicho nadie... Portugal se rompe!!!
Echando madeira al fuego...