Hace 16 años | Por sacsejam a europapress.com
Publicado hace 16 años por sacsejam a europapress.com

El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales(CEOE),Gerardo Díaz Ferrán,considera "imprescindible" abordar inmediatamente un debate a nivel nacional acerca de la energía nuclear para evitar que, al igual que ocurre con el agua, se convierta por su escasez en un problema de primera magnitud. La estrategia conlleva "plazos largos" y no puede resolverse con "soluciones que se tomen hoy y estén funcionando al día siguiente", afirmó en alusión al tiempo que lleva poner en marcha una central nuclear.

Comentarios

miperspectiva

Eso! Para que vamos a andar con tonterías, pongamos las cartas sobre la mesa, hombre ya!

D

Teniendo en cuenta que las de diseño nuevo son mucho más seguras y que se podrían hacer bajo tierra (no hace falta excavar demasiado), no veo mucho problema... quitando los residuos, claro.

trollinator

#2 ¿y de qué nacionalidad tendrían que ser los que dirigiesen la central para que tú te fiases de ellos?

c

La energía nuclear es la más limpia y eficiente que existe. Los ecologistas, el Gobierno y los empresarios lo saben...

¿Debe tener España centrales nucleares? NOOOOOO. Yo no me fiaría de una Central dirigida por españoles.

nadamas

La "pequeña" diferencia: el agua no se puede generar (de momento) pero la energía limpia se está generando cada vez en mayores cantidades.
La cuestión está en que las grandes compañías no son los dueños y productores de la energía limpia (son compradores de los productores) mientras que son los dueños y señores de la grandes centrales y mas aún si son nucleares.

D

A mí el que las proponga Díaz Ferrán (el que quería reunirse con Solbes el día 10 de marzo) no deja de hacerme gracia...

Lo que sí que es cierto es que un planteamiento y análisis serio, junto con el resto de energías, es imprescindible. Eso sí, apartando todos los prejuicios, consignas políticas y poniendo todas las cartas sobre la mesa (pros y contras de cada una de ellas).

El Padre de Montoya