Hace 15 años | Por diegusss a imperioromano.com
Publicado hace 15 años por diegusss a imperioromano.com

C&P Así lo constatan los restos encontrados en el monte Testaccio de la capital italiana . Para ellos era un basurero; para nosotros, un archivo que guarda una parte fundamental de la historia para entender algo más de la vida romana. Es el Monte Testaccio, que atesora en la capital italiana más datos de lo que cualquiera pudiera pensar a la vista de los restos de las 25 millones de ánforas que lo forman. Esas que los olivareros andaluces enviaban a Roma cargadas de aceite ya en el siglo I.

Comentarios

diegusss

#1 Ni internet, tampoco existía internet...

D

Ni Fraga ¿o igual si?

D

#2, no existía ni Hegel ... lol

D

#7, la paz ... lol

D

#8 ¿La paz? Que te folle un pez

D

El libro Una conjura en Hispania de Lyndsey davis da una idea

c

#4 Fraga si, Manolus Fragus para los amigos. Por aquel entonces, el Senator Fragus ya se bañaba en las playa de la provincia Tarraconensis por el hundimiento en el mar de un barco cargado de vino y aceite.

ikipol

Tampoco existía menéame, ergo no pudieron discutir sobre el concepto de nación en el imperio romano, con la quema de fotos, banderas, etc...

trollinator

#5 si existía, le llamaban Senado. Lo que pasa que no podía registrase todo el mundo, pero éso no impedía que estuviese lleno de trolls

ikipol

#9 No hombre, esos eran unos pocos que se llevaban todo el día con pajas mentales. Era fresqui

D

Roma consumía pues aceite romano. Hispalense todo lo más. En el siglo I no existía Andalucía.

V

¿Y qué nos han dado los romanos, aparte del alcantarillado, la sanidad, la enseñanza, el vino, el orden público, la irrigación, las carreteras y los baños públicos?

V

#13 Pijus y su mujer: Incontinencia Suma

Nimice

[Chuminada=on]

Pijus Magnificus debe andar detras de todo ¿si o no?

[Chuminada=off]