El papa Benedicto XVI fue recibido hoy por el presidente de Italia, ante quien aseguró que la Iglesia católica no amenaza para nada la libertad. "No hay razones para temer una prevaricación en detrimento de la libertad de parte de la Iglesia y de sus miembros, que esperan se les reconozca la libertad de no traicionar su conciencia iluminada por el Evangelio", afirmó el Papa. Las corrientes laicas, minoritarias en Italia, acusan a menudo al Vaticano y a la Conferencia Episcopal Italiana de intervencionismo en el debate político.
Comentarios
#1 ¿El "Baticano" es la iglesia de Batman?
A lo que le contestó: "ya, ya, y mi primer ministro es un santo".
No la amenaza, la corta directamente.
Bueno, es muy sencillo no hacer caso a la Iglesia, ni seguir sus dictados y normas
La Iglesia es la mayor amenaza a la libertad que hay en cualquier estado, es decir, cuando hay algo que cree que solo lo que ellos dicen es la verdad y es la libertad, que solo en lo que ellos creen es lo verdadero, de por si es una amenaza para la libertad, no hace falta que lo digan abierta y directamente, es algo que viene implicito en su "predicación"
Lo mismo dijo Palpatine y mira como terminó la cosa
"No hay razones para temer una prevaricación en detrimento de la libertad de parte de la Iglesia y de sus miembros, que esperan se les reconozca la libertad de no traicionar su conciencia iluminada por el Evangelio"
De verdad, de verdad que ese rollo se puede traducir por "la Iglesia no amenaza la libertad" ?
#7, no es tan sencillo cuando hay un Concordato Iglesia-Estado de por medio.
no me imagino a la guardia vaticana al asalto
#4 se ma ido la olla!
y por qué dirían que sí?
La jerarquía católica lleva tratando de tener el poder terrenal, por lo menos desde Constantino. En muchas épocas lo ha tenido y en otras lo ha tenido menos. Y cuanto más poder político ha tenido, de menos libertad han disfrutado las personas. De eso podemos dar testimonio los españoles.
Bien lo saben ellos, pero son TAN hipócritas...
Los que amenazan la libertad suelen amenar también a la Iglesia