«Lo que me llama realmente la atención es el panfleto que empezaron a distribuir ayer y en el que se puede leer: "Cinco años de discriminación socialista contra Madrid. Los que más aportamos, los que menos recibimos. ¡Ya está bien, ZP!". Al más puro estilo Carod-Rovira y demás patulea nacionalista catalana. ¿Estamos ante una Unión del Pueblo Madrileño?. Es para tomárselo a guasa pero tristemente es la realidad y no es un desliz.»
No; la parte crucial del nacionalismo es la reivindicación de soberanía. La queja es la disminución en un 23% de la inversión pública en la comunidad de Madrid por razones partidistas (en cuyo fondo no entro).Nada que ver con el nacionalismo.
Qué gracia me hace esto de las "balanzas fiscales". "Pa mear i no eshar gota, hoiga". Por motivos estratégicos y/o políticos las grandes empresas suelen centralizar en Madrid (sobretodo) o Barcelona, aunque su actividad no se desarrolle en esas ciudades, o ni siquiera en esas comunidades autónomas. Por ejemplo, Unión Fenosa o Acerinox, fortísimas en su ramo, son gallega y andaluza, respectivamente. Sin embargo sus impuestos los pagan en Madrid, dada su razón social. Claro, al calcular la balanza fiscal, resulta que en promedio "los madrileños" pagan una barbaridad de impuestos, que se supone van a parar a subvenciones a las comunidades receptoras como Galicia y Andalucía. Nada, me hago nacionalista de la Avd. Compostela, de Madrid, que así los españoles "me deben" una burrada de millones. Lo que hay que leer...
#7 Hay que ser ignorante, pero que MUY ignorante, en ver en las reivindicaciones de la sociedad catalana por un reparto justo de los presupuestos durante los últimos 30 años una propuesta nacionalista.
Y es que hay que ser hipócrita. A nosotros nos han tachado de nacionalistas por quejarnos de la fuga de dinero año tras año, y ahora que les toca a los madrileños, tienen todo el derecho moral del mundo para patalear. Como diría Pedro Vera, me cago en mi vida.
Comentarios
No; la parte crucial del nacionalismo es la reivindicación de soberanía. La queja es la disminución en un 23% de la inversión pública en la comunidad de Madrid por razones partidistas (en cuyo fondo no entro).Nada que ver con el nacionalismo.
http://www.abc.es/20081028/madrid-madrid/sale-calle-contra-zapatero-20081028.html
#3 Lo rodean de otras partes, pero ciertamente es la parte crucial.
No veo reivindicación nacionalista ninguna; sólo económica.
No es una reivindicación soberanista, sino exigir que dejen de robarnos descaradamente.
#2 Eso es precisamente parte del nacionalismo.
Hay que ser ignorante, pero que muy ignorante, en ver en esto una propuesta nacionalista. Errónea que voto.
¡¡¡Y ya tenemos una bandera estelada!!!
Qué gracia me hace esto de las "balanzas fiscales". "Pa mear i no eshar gota, hoiga". Por motivos estratégicos y/o políticos las grandes empresas suelen centralizar en Madrid (sobretodo) o Barcelona, aunque su actividad no se desarrolle en esas ciudades, o ni siquiera en esas comunidades autónomas. Por ejemplo, Unión Fenosa o Acerinox, fortísimas en su ramo, son gallega y andaluza, respectivamente. Sin embargo sus impuestos los pagan en Madrid, dada su razón social. Claro, al calcular la balanza fiscal, resulta que en promedio "los madrileños" pagan una barbaridad de impuestos, que se supone van a parar a subvenciones a las comunidades receptoras como Galicia y Andalucía. Nada, me hago nacionalista de la Avd. Compostela, de Madrid, que así los españoles "me deben" una burrada de millones. Lo que hay que leer...
#7 Hay que ser ignorante, pero que MUY ignorante, en ver en las reivindicaciones de la sociedad catalana por un reparto justo de los presupuestos durante los últimos 30 años una propuesta nacionalista.
Y es que hay que ser hipócrita. A nosotros nos han tachado de nacionalistas por quejarnos de la fuga de dinero año tras año, y ahora que les toca a los madrileños, tienen todo el derecho moral del mundo para patalear. Como diría Pedro Vera, me cago en mi vida.
#8 se os ha llamado insolidarios, no nacionalistas.
Aclaremos conceptos por favor.
#3 La parte más importante.
Toda la razón.