El arzobispo Gianfranco Ravasi ha criticado que la decisión del ayuntamiento de Oxford de abolir toda referencia a la Navidad y cambiarla por el nombre de "Festividad de la luz invernal" es un síntoma del ateísmo que hoy se promueve con la indiferencia religiosa y la pérdida de identidad. "El verdadero diálogo se construye a través de la identidad (...) no se trata de algo extravagante, sino más bien de una negación consciente". El arzobispo considera algo muy positivo el que musulmanes se opongan a esta iniciativa.
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Mejor la llamamos "Festividad de Invierno del Corte Inglés" y que sea una empresa privada la que pague las bombillitas...