Hace 15 años | Por --116647-- a spad.com.ar
Publicado hace 15 años por --116647-- a spad.com.ar

No hay una técnica mágica para salvarnos el pellejo cuando somos asaltados, ni podemos dedicar nuestra vida a entrenarnos como un campeón de karate. A parte de nuestra vida, también podemos poner en riesgo las de otros inocentes. Con esto no quiero decir que no debamos defendernos cuando la situación lo requiera. Pero lo principal es estar atentos y seguir unos consejos prácticos para evitar toda situación de riesgo.

Comentarios

.hF

Pero... ¿se puede saber en que clase de infierno vive el que ha escrito eso? lol

gatokan

¿Y que tal la más antigua del mundo? CORRER
O su deribada: Patada en los cojones y CORRER

.hF

#1 Prefiero el modo avanzado: Llorar como un niño con miedo, patada en los cojones y CORRER

.hF

¿Cambiar horarios y recorridos? ¿vestir de manera discreta (por seguridad)? ¿mimetizarse con otros grupos?

Yo en la vida real no necesito hacer eso (y la inmensa mayoría de la gente que conozco tampoco).

D

Joer... #5 #6 Joer que sois de Barranquilla lol lol lol lol

Yo creo que no hay mejor defensa que unos vaqueros gastados y unas zapatillas de marca blanca....

D

#7 He oido decir que quien piensa siempre en peligro a lo mejor es él el peligroso.... lol

.hF

#8 Conozco a varios, gracias. Y ni uno anda así lol

D

Lo cierto es que si tienes una escuela de defensa personal, es un buen negocio crear miedo. Por otra parte esta gente es de Argentina, y yo que he estado por ahí bastante, he de decir que hay muchas zonas bravas, bravas.

D

#3 ¿En qué clase de paraíso vives tú?

D

#3

¿En la vida real?

Pd: Los consejos que pone se los ha plagiado a un libro de Bruce Lee.

D

#7

Se vé que conoces a pocos empresarios y dueños de comercios.

PD: La mayoria son cosas lógicas.

Por ej, no tirar a la basura cartas de bancos, en ciudad ir con los seguros del coche bajados. Según por que zona de la ciudad pases, no llevar oros, ni ipod ni móviles a la vista...

D

Efectivamente: si te sacan un cuchillo bien grande tú estate atento y el peligro desaparecerá solo. ¿Qué te he dicho? Venga ahí, ¡presta atención!