Hace 15 años | Por Meneeitor a telegraph.co.uk
Publicado hace 15 años por Meneeitor a telegraph.co.uk

Inspeccionada por el Museo Británico y vendida en 2003 a través de Christie's al Ayuntamiento de Bolton (Inglaterra), la estatua de la princesa Amarna, hija del rey Ajenaten y Nefertiti, era supuestamente uno de tres ejemplos de arte egipcio de ese período, de 3.300 años de antigüedad. En realidad, la estatua fue esculpida por Shaun Greenhalgh, en su jardín en solo 3 semanas. Greenhalgh fue condenado en 2007 a 4 años y 8 meses de cárcel por delito de falsificación. Ahora el Ayuntamiento de Bolton planea exhibir la estatua para atraer público.