En un caso sin precedentes, la Siderúrgica Lázaro Cárdenas Las Truchas S.A. de C.V., en el Estado de Morelia (México), despidió a 56 empleados por profesar el culto de los testigos de Jehová, por lo que la Comisión Estatal de los Derechos Humanos ya realiza las investigaciones correspondientes, tal como explica Francisco García Davish en el diario mexicano Milenio. Su no participación en política ni en reivindicaciones laborales hizo que fuera un sindicato el que pidiera a la propia empresa que despidiera a los Testigos de Jehová.
Comentarios
#1 por muy muy poco que me gusten, y mira que los conozco bien, no creo que se les haya que discriminar. Son libres de no participar en movimientos sindicales o políticos como cualquier otro.
Si queremos predicar libertad religiosa, politica o sindical, tenemos que hacer eso.... predicar la LIBERTAD, sea cual sea la opción de la otra persona respetarla.
Y me parece totalmente reprobable el hecho en cuestión. Se debería llevar a juicio todos este tipo de discriminación.
#2, #3 Si los testigos de Jehova lo hicieran realmente por conciencia estaria de acuerdo con ustedes, pero ellos solo obedecen a las interpretaciones que hace su Cuerpo Gobernante de la Biblia. Estan tan acostumbrados a no pensar x si mismos.
#4 Soy tan conocedor como tú de que todos los testigos tienen solo una conciencia y un modo de pensar, y el que discrepa es expulsado. Por mí, lo mejor sería que no existiera tal creencia, así como casi todas las demás, que unas más otras menos, todas causan problemas y separación en la sociedad.
Pero yo no seré quién les dé la razón para sentirse atacados y discriminados y así, dar más veracidad a sus mentores de cara a los creyentes, si no todo lo contrario, así verán que no hay que ser un fiel seguidor de Jesusito o el modelo religioso de turno para tener unos valores que defienden la paz y promueven actitudes positivas.
#4 Y la diferencia con el resto de la gente es.... ¿?¿?¿?¿
#5 El que discrepa es expulsado
Oye, por algo bueno que hacen... x'D
#7 jeje bueno en sí el que hace bien es el que discrepa. Para el que discrepa es malo porque le echan, para los que estamos fuera como si le peinan el sobaco... así igual discrepa más, así que mejor para él.
A ver si aprendemos pronto en España!