Frente a los desafíos a la moral que protagonizan la actualidad política nacional las hermanas no pierden la esperanza. “Nos llegan muchas cartas de católicos que se movilizan contra el aborto, la eutanasia... Sabemos que el triunfo de esta lucha está en los conventos de clausura, y en la oración de todo el mundo”, dice Beatriz. La oración es el arma con el que cuentan las hermanas. “En una ocasión la priora nos dijo: ¡Hijas, que mal lo estamos haciendo!”, recuerda la Madre Superiora.
Comentarios
Me parece una idea excelente. Que todos estos fanáticos se recluyan en un convento de clausura.
¿Cómo van a comprender y rezar por el mundo y sus necesidades si no lo conocen? Nunca entenderé la clausura. Otras formas conventuales hacen servicios sociales en caritas, en hospitales...pero en clausura, eso es de otro siglo.
que lamentable que aun exista gente que cree que mejorara el mundo solo mediante la oración. Si fueran creyentes "normales" aparte de rezar, harian otras cosas para mejorar el entorno...Si se encierran a orar, no crecen, no cultivan su intelecto, terminan siendo viejecitas bondadosas que creen en el viejo pascuero y el conejo de pascua.
Por suerte las "vocaciones" de monjas de claustro disminuyen dia a dia...
eso eso, a rezar mçás y a dejar de molestar al mundo, no como esos capullos del opus, que no paran de dar por saco, pero tiempo al tiempo, que al final van a recibir su propia medicina.