Sin duda alguna, existen experiencias compartidas entre quienes conocimos el uso de discos compactos y cosas que con la generación iPod no volveran a ocurrir como por ejemplo: gastar horas y horas intentando leer las letras de las canciones desde la portada y meter y sacar discos de los reproductores; prestar un disco compacto a un amigo con la esperanza de que algún día te lo devuelva; paredes llenas de cajas de discos compactos; las famosas canciones ocultas. [Eng]
Comentarios
La verdad es que la mayoría de las cosas eran más incómodas, pero yo creo que la música se disfrutaba más. Recuerdo la ilusión de grabar una cinta cassette de "Varios", y escucharla una y otra vez hasta que se estropeaba. Hoy en día, tenemos tanta música, que apenas lo apreciamos.
Señores, acabo de apuntarme al RSS del blog. Y #5 tiene razón. Es lo mejor de comprar discos, que al haberte gastado un dinero (y el esfuerzo que supone conseguir ese dinero) , lo aprecias mejor. También se apreciaba mejor al principio del P2P, cuando el soulseek o el audiogalaxy tardaban DOS horas para descargar un MP3 de nueve minutos.
Ahora, te bajas dos discografías por hora, y no sabes ni lo que tienes ni si lo has escuchado o no.
Hoy me he bajado el disco de Carlomagno que ha sacado el Saruman/Dooku (nunca recuerdo el nombre de este pavo), y lo he borrado casi inmediatamente. Si me hubiera gastado doce o quince pavos en él, lo hubiera escuchado hasta que me gustara.
Ya no hay niños jugando a las canicas ni a las peonzas serán todos gorditos
#3 Cada vez estamos más cerca de la futurista Wall-e
Afortunadamente
Ah, qué gran época la del gramófono, esos discos de cera...