Publicado hace 12 años por --80001-- a historiasdehispania.blogspot.com.es

Es probable que la repugnancia hacia todos los pueblos europeos (pues el ultranacionalismo alemán presupone la superioridad sobre todos ellos) hacía necesario desplazar el origen mítico mucho más allá. En apoyo de esta idea acudieron, poco a poco, dos vías: una, el mito de la Atlántida, que hacía a los arios los habitantes originales de la isla perdida; otra, el Tibet y zonas de la India, conocidas cunas de la Humanidad, así como de la espiritualidad humana.